graduaciones...
El viernes que viene voy de graduación. Hace ya un año, más o menos, que me gradué. Vaya día... nervios, sudores, de un lado para otro hablando con todos mis compañeros. Es lo que tiene no cerrarse a casi nadie. Admirando lo guapas que estaban las niñas y felicitando la elegancia de algunos compañeros. Este año voy en calidad de acompañante. Hoy mismo me he comprado la ropa. Unos pantalones (o un pantalón, ¿cómo se dice?) y una camisa celeste. Dicen que el azul me sienta bien. Sólo me queda la corbata. Sí, sí, corbata, elemento que no me he puesto ni para mi graduación. Nunca lo he hecho por la seriedad que otorga esa prenda, pero en esta ocasión servirá para restarle. Me quedan los zapatos, pero creo que hago el avío con los que tengo. La verdad es que creí que iba a tardar más en comprar, pero todo ha salido rodado y por un precio bastante asequible. En fin, todo sea por estar guapo ese día. Ah! y las gafas de sol, que también me gustaría tenerlas. Ya las estuve mirando y no son muy diferentes a las que me regaló mi abuelo, sólo que graduadas. Hablando de gafas graduadas... ya sí soy el graduado; te voy a secuestrar, y no me hace falta ni luchar, ni huir en autobuses...
2 comentarios
Archienemiga de la de arriba -
GATUNO! q no te metan droga en los bolshillos
Alina -